jueves, junio 11, 2009

Discriminante

Me puse a pensar a quienes discrimino, y pues si soy bien discriminante, no en forma activa, tratando de dañar a la gente, sino pasivamente, simplemente ignorando a ciertas personas. Sobre todo suelo ser antipático con gente que no es de de mi edad (más de 5 años de diferencia ya es mucho), con la gente religiosa o supersticiosa, con quienes saben poco de ciencia, con quienes presumen de estar siempre en lo correcto, con los hombres afeminados y hasta con las mujeres (y seguramente con muchas otras personas más).

Y no soy homofóbico, sólo ligeramente misógino, nunca me ha agradado el estereotipo femenino, ¿por qué deben arreglarse tanto? ¿por qué deben siempre querer agradar a todos? ¿por qué aceptan que los hombres las lleven a cenas románticas para terminar teniendo sexo? ¿por qué no se llevan bien entre ellas? ¿por qué critican tanto? Bueno, hay mujeres que me agradan, inclusive podría decir que sentimentalmente, pero la mayoría no.

Yo no entiendo, no sé para que sirve ese comportamiento, complica las cosas y es taaaaan molesto, no me gusta. Desde luego tampoco me agrada que ahora también los hombres quieran ser "lindos". ¿Qué es eso? Estaban mejor las cosas como antes, es decir, no estaban bien, pero pudieron haber cambiado de otra forma, porque parece que todo va en la dirección incorrecta. Y ahora resulta que ya nadie tiene miedo, todos parecen creer que entienden la vida, se creen felices con sus costumbres, con todo mundo siendo "lindo" aunque solo sea en apariencia.

Es evidente que yo no soy "lindo", no me gusta el romanticismo, ni el sexo, ni muchas cosas que han llegado a considerarse como "verdades", supongo que nadie lo nota porque desde que nace vive inmerso en esa cultura, y no hay más remedio que aceptarla como algo natural. Yo siempre tuve problemas para asimilar la cultura, y nunca me pareció algo natural sino más bien una creación muy artificial de mis padres, y maestros y todos aquellos que la defendieron. Al final creo que discrimino a casi todo mundo.

1 comentario:

Enrique dijo...

Esa idea de que las cosas pudieron haber cambiado de otra forma me hizo abrir la bocota, ¡no se me había ocurrido semejante idea, nunca, nunca!, como síntesis no, nunca, nunca.
Muchas veces me han mencionado que no soy nada lindo, que soy grosero, que mis actitudes no son muy agradables, que soy muy raro, el punto es que hay ocasiones en las que después de que me lo dicen me pongo a pensar en que fue lo que les molestó, hay ocasiones en que termino entendiendo cual fue el problema, pero en otras ocasiones no creo que haya sido grosero, pero qué tanto no tengo bonitas maneras para con los demás, no lo se, no crecí en verdadera convivencia con los demás.
Hay ocasiones en las que pienso en lo que hacen o dicen los demás, en lo que digo y hago yo, trato pero me es un ejercicio cansado, tratar de ver y entender cuando algo en realidad no es bueno, es algo grotesco, abusivo, discriminante, pero aceptado porque es "de uso corriente", trato de ver esas cosas y despues tratar y digo tratar de cambiarlas al menos en mi, pero es difícil.
Saludos Manuel.